La calidad del ambiente acústico en el que vivimos y trabajamos es crucial para nuestro bienestar físico y mental. Por desgracia, muchos espacios se caracterizan por un ruido excesivo que puede provocar estrés, trastornos del sueño y dificultades de concentración. Para mejorar el confort de los espacios, el aislamiento acústico es la mejor solución.
Y eso no es todo: en nuestro país, la contaminación acústica se considera un problema grave para el medio ambiente y la salud de las personas, por lo que está regulada por la Ley 447/1995 y el DPCM de 5 de diciembre de 1997. Todo edificio, como indica Diasen, debe cumplir una serie de requisitos en materia de aislamiento acústico para reducir el ruido procedente del exterior o que se propaga desde el interior.
Existen distintos tipos de revestimientos para aislar acústicamente, y cada uno de ellos tiene características específicas y aplicaciones diferentes. En este artículo, exploraremos los tipos más comunes de revestimiento para ayudarte a elegir la mejor solución para tus necesidades específicas.
Revestimientos minerales fonoabsorbentes y fonoaislantes
Los revestimientos minerales fonoabsorbentes y fono aislantes están constituidos por productos como la lana de roca o la lana de vidrio. Son sin duda los más utilizados tradicionalmente en la construcción.
Como materiales porosos, son una excelente solución para las altas frecuencias, ya que las propiedades de absorción acústica de los materiales porosos aumentan con la frecuencia y el grosor del panel. Para conseguir una buena absorción acústica, es necesario centrarse en paneles de alta densidad que también tengan una buena resistencia a las vibraciones.
Estos materiales tienen un alto rendimiento acústico debido a su estructura porosa que absorbe y dispersa el sonido, reduciendo la reverberación. Se utilizan mucho cuando se necesita aislamiento acústico, no sólo por su capacidad para absorber el sonido del interior o del exterior, sino también porque son excelentes aislantes térmicos.
Son fáciles de instalar, ya que pueden aplicarse a paredes, suelos o techos. Estos materiales pueden aplicarse en forma de paneles o rollos, o mezclarse con otros materiales de construcción para crear estructuras de aislamiento acústico. A veces pueden incorporarse a obras de albañilería, de modo que el aislamiento acústico no sea visible y se consiga un mejor resultado estético.
Los materiales aislantes minerales son resistentes al fuego, lo que los hace muy seguros en cualquier edificio. Evitan el moho y la humedad, ya que no permiten que el agua penetre a través de las paredes. Por lo tanto, son sin duda una buena opción para aislar tu hogar o lugar de trabajo. Sin embargo, no son materiales fáciles de eliminar o reciclar.
Así, el sector de la construcción ha identificado nuevos materiales vegetales para utilizarlos en el aislamiento acústico y térmico con el fin de reducir su impacto en el medio ambiente. Veámoslos juntos.
Revestimientos fonoabsorbentes y fonoaislantes de materiales vegetales
Los revestimientos fonoabsorbentes y fonoaislantes fabricados con materiales vegetales se han hecho cada vez más populares en los últimos años debido a su capacidad para absorber y aislar el sonido de forma natural y ecológica. En general, estos materiales son más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente que los materiales minerales y sintéticos que hemos visto antes.
El material vegetal cumple bien su función de aislar el ruido aéreo, el tráfico peatonal y las paredes laterales. Como materiales porosos, son una buena solución para las altas frecuencias, ya que las propiedades de absorción acústica de los materiales porosos aumentan con la frecuencia y el grosor del panel. También tienen una buena resistencia a las vibraciones.
Entre los materiales vegetales utilizados para la insonorización figuran:
- El corcho, uno de los materiales más utilizados para la insonorización por su capacidad para absorber el sonido y aislar el calor. El corcho se utiliza en forma de paneles o pintura aislante aplicada directamente a las paredes;
- El cáñamo es otra opción natural para la insonorización. Se utiliza en forma de paneles fonoabsorbentes y tiene la capacidad de reducir el ruido aéreo y la reverberación;
- La lana de madera es un material fonoabsorbente y fonoaislante derivado de la fibra de madera, fácil de eliminar y reciclar;
- El musgo es un material vegetal que puede utilizarse como revestimiento fonoabsorbente. A menudo se utiliza en combinación con otros materiales para crear un efecto tanto decorativo como funcional.
Aislamiento de techos y suelos
Aislar acústicamente techos y suelos puede ser un paso importante para mejorar el bienestar acústico de una habitación, pero ¿cómo se hace? Se puede optar por materiales fonoabsorbentes minerales o vegetales, como los que acabamos de mencionar. Estos materiales pueden colocarse bajo el suelo o el techo existentes o utilizarse como capa intermedia entre las paredes del edificio y una nueva capa de mampostería, madera u otro material visible en el interior de la habitación.
Como barrera fonoaislante puede utilizarse lana de roca, corcho, madera u otros materiales fonoabsorbentes, así como láminas acústicas o placas de yeso fonoaislantes. Como alternativa, hoy en día existen en el mercado alfombras fonoabsorbentes que se utilizan bajo el suelo o el techo existentes para reducir la transmisión del sonido.
Otra alternativa es la posibilidad de aplicar paneles fonoabsorbentes en el exterior de la mampostería, visibles para quienes se encuentren en la habitación. Se trata de una opción muy sencilla y rápida de instalar, pero también hay que tener en cuenta el resultado estético de la intervención, para no comprometer el aspecto de la estancia.
Uso de materiales sintéticos
Los aislantes sintéticos, aquellos materiales químicos que suelen derivarse del procesado del petróleo, suelen ser absorbentes acústicos de célula abierta. Este tipo de aislantes incluye el poliestireno, el poliuretano expandido, etc.
Cuestan poco y son fáciles de aplicar, pero son difíciles de eliminar, no resisten muy bien el fuego y no son especialmente eficaces por sí solos. Materiales como el poliestireno y el poliuretano son excelentes para aislar cavidades y reducir el ruido de impacto.
También son bastante eficaces para el aislamiento térmico, pero nunca tanto como los materiales vegetales como el corcho. Cuando se quiere aislar acústicamente una habitación, conviene optar por soluciones eficaces y también respetuosas con el planeta. Sólo así será posible conseguir excelentes resultados protegiendo plenamente el medio ambiente.
