Todas lo hemos vivido alguna vez: la angustia que provoca ver una mancha roja por la mañana en unas sábanas inmaculadas. Cuando estamos en casa, una simple toalla de ducha para proteger la cama puede bastar; sin embargo, en casa ajena, la vergüenza se triplica debido a los tabúes que siguen existiendo en torno a la menstruación. Afortunadamente, ¡las pérdidas no son ninguna catástrofe! Algunos trucos te ayudarán a evitarlas y pasar noches más tranquilas incluso durante ese período, a veces, algo complicado.
Las bragas menstruales, una solución imparable
¿Conoces las bragas menstruales? Esta protección higiénica lavable y reutilizable es tan eficaz que la mayoría la considera como una auténtica revolución. Las bragas de regla ofrecen hasta 12 horas de protección. Si eliges unas con un nivel de absorción adecuado para ti, no tendrás el más mínimo problema. ¡Unas bragas menstruales Elia Lingerie, por ejemplo, puede incluso servir para hemorragias! Además, también existen shorties y boxers que cubren más superficie para aportar una protección adicional.
Para una solución totalmente segura, como habrás comprendido, puedes utilizar tus bragas menstruales junto a otro producto de higiene femenina como un tampón o una copa, aunque no es totalmente necesario.
Prevención para evitar sorpresas desagradables
Por muy eficaces que sean, ¡ningunas bragas menstruales pueden protegerte si no te las pones! Si tu menstruación tiende a “sorprenderte” llegando en medio de la noche sin avisar, ponte tus bragas menstruales en cuanto la fecha fatídica se vaya acercando.
Para ayudarte a anticipar esta “sorpresa”, descarga una app que permita realizar un seguimiento de la evolución de tu ciclo. Las aplicaciones que se contentan con “contar los días” suelen equivocarse con facilidad si los ciclos son irregulares. Por eso, es preferible decantarse por una app que se base en principios de la sintotermia. ¡Te sorprenderá la precisión de sus predicciones!
¿La posición ideal mientras dormimos?
Despejemos inmediatamente cualquier posible mito: non, ninguna posición mientras dormimos puede protegernos al 100% contra las pérdidas. Sin embargo, es cierto que dormir en posición fetal, de lado, contribuye a reducir los retortijones comprimiendo en menor medida los músculos abdominales. Al contrario, dormir boca abajo podría agravar los dolores, así como favorecer la circulación de la sangre.
Lo que debes retener es que no se sangra más durante la noche o durante el día. La única diferencia reside en la manera en que la sangre fluye. En lugar del flujo regular que una posición vertical (incluso estando sentada) permite controlar, la sangre tiende a acumularse mientras estamos acostadas y salir “de golpe” cuando nos levantamos. Pocas protecciones pueden hacer algo al respecto.
Para limitar los estragos, evita la pereza mañanera cuando te despiertes y ve inmediatamente al baño. Tampoco dudes en ir durante la noche si fuera necesario: así reducirás la acumulación de sangre.
Reparar los estragos
Tras haber consultado la opinión sobre las bragas menstruales para elegir correctamente las tuyas, conocer tu ciclo para evitar las sorpresas y aplicar una organización nocturna lo más práctica y eficaz posible, ¿sigues manchando tus sábanas? Saber cómo remediar el problema te ayudará, sin duda, a preocuparte un poco menos.
Debes saber que, en efecto, las manchas de sangre no son indelebles, ¡sobre todo si no intentas borrarlas con un lavado con agua caliente! Más bien, empieza por mojar el tejido con agua fría. No dudes en dejar que se empape con un quitamanchas antes de meterlas en la lavadora. Para las manchas más correosas, el percarbonato hace maravillas. Prueba este producto que usaban nuestras abuelas antes de darte por vencida.
Para terminar, recuerda que la regla afecta a más de la mitad de la población mundial. Por eso, sé indulgente contigo misma: quitarles importancia a los pequeños accidentes te ayudará a ganar en serenidad frente a este período a veces algo complicado.